El relanzamiento del plan de intervención urbana en Carlos Gardel fue presentado esta mañana por el intendente Lucas Ghi y autoridades provinciales. Las obras incluyen tareas de saneamiento, refacciones en los monoblocks y mejoras en plazas y calles internas. Según datos oficiales, más de 8.000 personas se verán beneficiadas. Sin embargo, algunos habitantes del barrio expresaron su preocupación por la continuidad de las obras y la falta de participación en el diseño de las soluciones.
A pesar del anuncio, no todos los vecinos están convencidos. “Ya han venido varias veces con promesas. Ojalá esta vez sea real”, comentó una vecina del complejo habitacional. Desde organizaciones barriales advierten que las mejoras no siempre responden a las prioridades de quienes viven allí y que hace falta una mayor presencia del Estado en cuestiones cotidianas como seguridad, recolección de residuos y mantenimiento de servicios. El plan ahora entra en una fase clave donde, más allá de la obra pública, se pondrá a prueba la capacidad de gestión y escucha de las autoridades.