El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, fue enviado a juicio oral por el presunto delito de abuso sexual simple contra su exsecretaria privada, Melody Rakauskas, y por desobediencia a una orden de restricción. La decisión fue tomada por el juez de instrucción Fernando Caunedo, quien rechazó el pedido de sobreseimiento del jefe comunal y dio por cerrada la investigación.

El caso comenzó en mayo de 2021, cuando Rakauskas denunció a Espinoza por un presunto abuso sexual ocurrido en su departamento. Tras la acusación, la Justicia impuso una orden de restricción, que el intendente habría incumplido, sumando así la imputación por desobediencia judicial.

En mayo de 2024, la jueza María Fabiana Galletti procesó al intendente por ambos delitos. Sin embargo, en febrero de 2025, la fiscal Mónica Cuñarro solicitó su sobreseimiento al considerar que no existían pruebas suficientes para sostener la acusación. Un mes después, el fiscal de segunda instancia Mauricio Viera respaldó esa postura, lo que parecía allanar el camino para que Espinoza quedara desligado del caso.

A pesar de estos dictámenes favorables al intendente, el juez Caunedo decidió avanzar con el proceso y enviar la causa a juicio oral, donde se determinará su responsabilidad en los hechos denunciados.

Posturas enfrentadas y próximos pasos

Desde el entorno de Espinoza, criticaron la decisión judicial y señalaron que Caunedo desoyó “los pedidos de primera y segunda instancia de dos fiscales distintos, más los sobreseimientos de años anteriores”. Además, aseguraron que existen audios que demostrarían un supuesto “modus operandi” de la denunciante.

El próximo paso en la causa será el sorteo del Tribunal Oral Penal que llevará adelante el juicio y la posterior fijación de la fecha de inicio de las audiencias.

Mientras tanto, Espinoza sigue al frente de la intendencia de La Matanza, en medio de un proceso judicial que podría tener un fuerte impacto en su futuro político.